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Los museos de Basilea cubren un amplio espectro de exposiciones, con el punto fuerte en las artes plásticas. Albergan una gran cantidad de fondos de relevancia internacional. Las aproximadamente tres docenas de edificios suponen una densidad de museos extraordinariamente elevada en comparación con otras ciudades de idéntico tamaño. Anualmente reciben más de un millón de visitantes.

Destacamos varios museos por su relacion con las artes y con la arquitectura. Estos museos generan una trama que, en un edificio de tal índole como una universidad de arquitectura, puede ser continuada. Asi, nos remontamos a un elemento como la galería (nace en el sXV) que en nuestro edificio nos va a configurar un paseo arquitectonico en el que se realizan exposiciones de la historia de la arquitectura de  modo cronológico: la historia de la arquitectura desde Egipto y Grecia hasta obras de arquitectos actuales. Este recorrido que mantiene un paralelismo a ese aspecto de fluir del río, junto a la trama de relaciones que se cosen obtenida previamente (espacios clasificados según fases de creacion de un proyecto) comienzan a configurarnos nuestro edificio.

¿Cómo tratar esta galería? Esta galería se tratará de modo que no sólo se exponga la arquitectura de las distintas épocas sino que el tratamiento de fachada en los distintos tramos y el propio espacio permita de  algún modo intentar obtener la sensación de lo que es estar dentro de un edificio de cada una de las etapas. Para conseguir esto la luz tiene que penetrar de distintos modos, también se tratará de abarcar lo relacionado a  la sensación de estar en un interior de edificio más ligero o en un edificio con muros más pesados, jugando con el propio terreno, etc.